A bocajarro

 

Veleta

Abandonó el viento a la veleta
Que quedó desorientada,
Inútil, quieta.

Abandona la luz esta mañana
Cuando traspasa el quicio
De mi puerta.

Poblado de silencio
El tiempo arrecia
Y me empuja, cobarde,
Por la espalda.

A su latir me entrego claramente
Testigo de este miedo primigenio
Y busco en el mañana fieramente
Algún residuo del antiguo celo.

La veleta, sin flujo ni latido,
Congelada en su seña
Sin mensaje;
Como yo, como soy ahora,
Como he sido.

Vivimos del pasado en el presente
Inútil es mostrarse arrepentido.
Será. Será mañana,
Si hoy no ha sido.