La mirada vive en tus ojos.
Cuando los ojos se abren
vuela lejos y choca y salta,
atrapa cosas;
los objetos que pueblan el espacio
los recorre, los nombra.
A veces duerme en ellos,
o juguetona los acaricia prendada,
o torpe tropieza y furtiva los acecha
suspendida en el aire…
MAS DE PRONTO SE ENCUENTRAN TUS OJOS Y LOS MÍOS
y se esquivan; cobardes mariposas.
Mortaja de clara espuma
sobre tu piel blanca, mi mirada dibuja.
Te escapas.
Como los ojos, al aire aspiro:
su claridad, la transparencia
viajar ingrávido y furtivo,
arrebatarte la luz y los colores,
tener tus formas sin palparlas.
Amarte imaginado.
La mirada es testigo.